El Maquinista

Título original: "The Machinist"

Año y país: 2004, España

Género: Thriller psicológico / Drama / Drama psicológico

Director: Brad Anderson

Reparto: Christian Bale, Jennifer Jason Leigh, Aitana Sánchez-Gijón

Trevor Reznik (Christian Bale), un fresador de una fábrica local, lleva un año sin dormir. El extremo agotamiento físico causado por el insomnio perjudica aun más sus escasas relaciones con los compañeros de trabajo y con su amante ocasional, la prostituta Stevie (Jennifer Jason Leigh). 

La febril mente de Trevor empieza a jugarle malas pasadas produciendo alucinaciones y una continua distracción. La cosa se complica cuando su compañero pierde un brazo en un accidente laboral en el que Trevor se ve implicado. Al mismo tiempo, Reznik descubre un papel pegado a la nevera de su casa con el que alguien le propone jugar "al ahorcado"...

Esta angustiosa película consigue crear un ambiente muy acorde al tema, oscuro y realmente claustrofóbico. El decorado varía poco, pasando de las lúgubres paredes de la fábrica a la fría y triste casa de Reznik. El único sitio donde junto con el protagonista podemos percibir las emociones positivas es la cafetería del aeropuerto que frecuenta Trevor para distraerse de sus problemas en compañía de la camarera Marie (Aitana Sánchez-Gijón). 

El punto más fuerte de esta cinta, sin duda, es la actuación. Christian Bale es realmente magnífico. El desarrollo de la trama adopta el ritmo con el que evoluciona la paranoia del protagonista, cada vez más tensa y asfixiante. La brusca transformación física que consistió en perder alrededor de 30 kilos para interpretar a Trevor Reznik es fascinante. La enfermiza delgadez del actor junto con su inconfundible manera de encarnar a los personajes de una psique vulnerable y desasosegada producen un doble impacto en el espectador. La emocionante interpretación por parte de Jennifer Jason Leigh y Aitana Sánchez-Gijón agudizan aun más el dramatismo de la historia.

Parece que el desenlace propuesto por los creadores no propone ninguna solución al conjunto de problemas del ámbito ético y moral que abruman al protagonista. Sin embargo, el objetivo de plasmar el calvario de una persona condenada a vivir con el sentimiento de culpa está alcanzado al cien por cien. La mente humana se busca un refugio entre los recuerdos y la imaginación mientras que el cuerpo se consume rápidamente en un acto de auto-castigo.

Nota de "Sofá y Palomitas": 8 / 10

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